13 de septiembre de 2008

GEOGRAFIA TANGUERA XIV- X FESTIVAL DE TANGO BUENOS AIRES

En diciembre de 1999, con la galaxia tanguera aún convulsa por la muerte de Cadícamo (vivió durante 99 años pero sólo transitó por un siglo) se produjo en Argentina el cambio de gobierno de Menem por De la Rua. Durante el recorrido del nuevo mandatario desde su residencia familiar, en la plaza de Vicente López por 9 de Julio y Av de Mayo hasta su nuevo domicilio en la Casa Rosada, miles de personas lo aclamaban creyendo ver en él el cambio de ciclo que el país necesitaba. ¡Quién podía imaginarse que diez años después muchos de ellos suspiren por el regreso del Riojano! Yo estuve allí y lo vi. Y también en esos dias descubrí la existencia de un festival aún en su estado casi embrionario , que afortunadamente pasó inadvertido para nuestra ministra Aido y sus secuaces de la comisión de sabios abortivos y ha podido hacerse mayor , y al que estoy abonado. Muchos años, demasiados según mi mujer, he estado acudiendo allí en lo que se me antojaba mi penúltimo viaje austral. En mi memoria quedan recuerdos de espectáculos imborrables por calidad o emoción, como un crepuscular Alberto Castillo en el Tasso, como Mores en el rosedal de los bosques de Palermo o como el sexteto Mayor en La Rural en un concierto del que mi padre seguro que aún se acuerda. Ha habido años mejores y peores (en 2004 pasaron dos dias hasta que se cumplió algo del programa), ha cambiado de sedes casi en cada edición y tambien de fechas (diciembre , febrero-marzo y ahora agosto), pero aunque lo intenten no han conseguido que abandone.

Así pues, vuelvo de pasar unos dias respirando dos por cuatro en el festival de este año. Y ya es la décima edición. En esta ocasión volví a ir acompañado, y eso no deja de sorprenderme. Mi partener era una pipistrela morena, moderna y moderada, o eso creía yo hasta que la vi comer,

“que es más barato que invitarle a una morfada
comprarle un traje y un tapado de visón”

pero aguantó mi ritmo con una entereza sólo quebrada en un par de ocasiones más que justificadas. Y encima aún me miente que le gustó, y la pobrecita salía de los conciertos tan mareada que no era capaz de mantener la vertical en las complicadas aceras bonaerenses.

Este año el festival ha tenido lugar del 15 al 24 de Agosto, y han tenido la felíz idea de añadir a continuación el 6ª campeonato mundial de baile, con lo cual los aficionados a este género hemos tenido más de dos semanas de actividad tanguera. El esfuerzo por parte de la organización ha sido grande y ha contado con el apoyo decidido (aunque siempre lo ha tenido , pues no hay tango fuera del paraguas del estado) de la administración, dispuesta a convertir el mes de Agosto en el mes del Tango a imagen del febrero carnavelesco de Rio. El intento es loable aunque yo crea equivocadas esas fechas tan invernales que impiden, por ejemplo, conciertos o milongas al aire libre. Aún así, mucho tendrá que trabajar el Director Gustavo Mozzi, si continúa, para sacarlo adelante. La Feria de productos lleva estancada desde hace años, las actividades paralelas son comparsas, algunas de las sedes no son nada apropiadas y la organización se ve desbordada en algunos casos por la imprevisión. Salva todo esto que la materia prima es buena y abundante, casi todas las figuras han pasado por los casi 150 espectáculos que han derretido a los aficionados.

El programa se puede consultar AQUÍ , pero es de mareo la nómina de musicantes. Sin ánimo de ser exhaustivo Leopoldo Federico, Jairo, Pablo Mainetti, Gabriel Chula Clausi, Amelita Baltar, Raúl Garello, Juan Carlos Cáceres, la Orquesta Escuela de Tango dirigida en esta ocasión por Marconi, Aníbal Arias, Fernando Suárez Paz, Juanjosé Mosalini (veinte años después)... tango de vanguardia, tango electrónico, orquestas, solistas, grupos de variadas tendencias, viejas glorias y jóvenes talentosos (alguno de ellos no tanto) hombres, mujeres y niños primero.
Con respecto a las sedes, lo mismo, esto es, para todos los gustos. La sede central eran los Almacenes Harrods de la calle Florida. Un imponente edificio que llevaba abandonado casi más tiempo que construido. Felizmente se ha recuperado, aunque sólo el primer piso, para esta ocasión. Es un local muy agradable para las clase de baile , charlas o seminarios e incluso para la feria de productos, pero no reúne las condiciones mínimas para conciertos, ni por su sonoridad ni por su visibilidad muy incomodada por innumerables columnas.

El teatro Avenida es concido como el teatro de los españoles por encontrarse en una zona donde la colonia española estableció sus negocios y restaurantes. Situado en la Av Mayo entre 9 de Julio y el Congreso y rodeado de restaurantes con nombres como Asturias o España, donde siguen ofreciendo fabadas o paellas que reconozco no atreverme a probar, tiene una programación casi estable de obras de clásicos españoles y de zarzuela. En una bocacalle próxima existían dos cafeterías , una repubicana y otra monárquica, que durante los años 30 se convirtieron en premonitorios escenarios de peleas entre los dos bandos.

Bueno, volvamos al Tango. El Teatro Avenida acogía el programa musicalmente más ambicioso del festival: la recuperación de obras y arreglos de orquestas emblemáticas algo olvidadas, entre ellas las de un Troilo primigenio, la orquesta de cuerdas de Piazzolla que cambió el tango a finales de los 50 o la Orquesta Típica Candombe de Sebastián Piana en los primeros años 40 con sus colaboraciones con Manzi. Por si esto fuera poco, un homenaje al injustamente olvidado Alberto Mastra (algún día escribiré sobre el tango en Uruguay), el regreso de Mosalini (20 años no es nada), la apertura del festival con Leopoldo Federico y la clausura con Rubén Juárez. ¡Vaya par de bandoneones!

El teatro IFT en el barrio del Once, con una programación algo menos seria y con la incomodidad de los coliseos olvidados por las reformas y el progreso; el Niceto Club, una milonga en Palermo dedicada a las nuevas tendencias del electrotango; varios centros culturales, alguno de ellos muy curiosos como el Centro Cultural del Sur en el barrio de Barracas, una casa de campo conservada en el centro de la ciudad, con sus patios y establos donde, sin que ello tenga doble lectura, se montan los espectáculos; la Casa del Tango en Almagro; la Academia Nacional del Tango, desde donde Horacio Ferrer intenta poner algo de orden en este caótico mundo sin mucho exito, la verdad,; un puñado de “Bares Notables” y el inevitable Torquato Tasso completaban la nómina de unas sedes donde se ha obrado este milagro, porque milagro es que la gente acuda a locales tan mal acondicionados.

Aunque sea salirse un poco de lo referente al Festival, voy a comentar un proyecto bonito que lleva a cabo la ciudad de Bs As, que es el de los Bares Notables. Bares, restaurantes, cafés o confiterias que han tenido importancia en la historia de la ciudad se unen en un club en el que se realizan actos literarios, tangueros o culturales en general. Como hay Bares Notables en casi todos los barrios, estos actos van recorriendo toda la ciudad. Estos locales son cada uno de su padre y de su madre, y como padres y madres los hay de muchos tipos (limpios, sucios, aseados, viejos, abandonados...) así son sus retoños. Los hay muy cuidados y repletos de japoneses, como el Tortoni; lo mismo pero sin japoneses, como Las Violetas; algo menos pomposos, como 36 Billares; con ambiente progre como Clásica y Moderna; y cutres a más no poder, como Los Galgos o mi preferido, el Bar de Roberto, donde las sillas pierden la espuma por las rajas del skay y hay botellas que tienen más mugre encima que líquido dentro, eso por no hablar de los servicios, que son de esos en los que mi cuñada Pi suele perder las gafas. Tiene el Bar de Roberto una peña tanguera con un horario harto complicado y del que han salido figuras como Ardit o Chambouleyron lo que perdona el skay, la espuma, la mugre y el horario. Como se puede ver, sólo hay una cosa que une a estos locales , y es la nominación como Bar Notable, en algunos casos notablemente cutre.

Volvemos al festival, y para acabar esta primera entrada (en la próxima desgranaremos una por una las actuaciones que presencié), decir que, aparte de los espectáculos ,elfestival se completaba con conferenias, seminarios, clases de baile, muestras de dibujos y objetos, ferias de productos tangueros como libros, discos, zapatos, e incluso una representación del festival de tango de Finlandia (del que ya escribí una entrada anterior a la que remito a los que hasta aquí hayan llegado) , y un ciclo de cine en el que se constata de nuevo que Gardel, Libertad Lamarque, Hugo del Carril, Ada Falcón o Alberto Castillo (memorable película para iniciados “El tango vuelve a París” con la orquesta de Aníbal Troilo y con una interpretación de “Ninguna” por parte del "doctor" que después de cincuenta años ninguno ni ninguna ha igualado) , pudieron dedicarse a la gran pantalla porque cantaban como los ángeles, pero sólo por eso.

Y una crítica que ya he mandado tambien a la organización del festival, y que seguro que estará reposando en la papelera de la aprendiz de la secretaria de algún asistente del adjunto a la dirección. No se puede pretender que un festival sea internacional y repartir las entradas a los actos principales una semana antes en un local de Buenos Aires y sólo de forma presencial. Mucha gente (bueno, lo acepto, no tanta) entre ellos yo, no pudimos tomar un autobús en España para retirar las entradas y volver a casa a cenar. Así es que, al final, me vi obligado a “sobornar” al portero. Es lo que hay. Año tras año, y esto es un guiño a la “liberal propietaria” de este blog pasan las ediciones y siguen sin darse cuenta de que el hecho de que las entradas sean “gratuitas” provoca una sobredemanda que completa los aforos, impide que otros puedan acudir y, al final, dejan vacías las localidades de la gente que retiró las enradas “por si acaso”. Lo gratis para algunos siempre sale caro para el resto.

Y, ahora, retomando nuestro casi olvidado concurso “el Gardelín de oro” ahí va la suiguiente pregunta (y ya van quedando pocas). En el capítulo XVI del próximo premio nacional de narrativa, el libro de la propietaria del blog, se pueden leer los siguientes versos:

“¿quién te iguala por tu rango
en las canyengues quebradas del tango,
en las conquista de los corazones
si se da la ocasión?”

Sólo una pista, aunque se que con google no hace falta. Existe un quinteto de guitarras con el nombre de este tango. El que consigua decirme cuál de sus componentes ha editado un disco en solitario con la participación, entre otros, de Cristian Zárate, y el nombre de este disco, tendrá puntuación doble.


Un abrazo a mis, pocos, incondicionales.
GAVION.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Estais invitados a mi sitio:
http://www.artdulac.com/blogs/artdulac/index.php

Un saludo .

ROBERTO CERVANTES P. dijo...

Un saludo desde México. Soy asiduo visitante a tomar mate o café con Malena, de ahí que vi tu página y decidí visitarte. Me gusta este Blog, el tuyo, por que hablas de historia, complementas el sentir de lo de Malena. Cada uno con su estilo (que no deben cambiar), son muy buenos.
Me interesa todo lo que escribes por acá y estaré de visita con frecuencia. Un saludo
Roberto C.

Anónimo dijo...

Amigo anónimo:
ya visitamos tu poético sitio, al que volveremos cuando nuestro estado anímico nos lo aconseje.Enhorabuena por tu trabajo y bienvenido al nuestro.

Anónimo dijo...

Amigo Roberto, de Vuelvo al sur:
no deja de asombrarme que, gracias a internet, gente que desconoces comparta con uno aficiones. Ya visité tambien tu blog y me parece estupendo y trabajado. Lástima que ya visite, junto a zuppi, tu país el año pasado.Volveremos. Bienvenido al club.Con los que somos y vosotros, ya podemos organizar una partida de naipes.