
19 de diciembre de 2010
UNA URGENTE E INAPLAZABLE REFORMA CONSTITUCIONAL.

4 de noviembre de 2010
24 de octubre de 2010
DANDO POR SACO
País Vasco. Bilbao, Vitoria, San Sebastián. Vizcaya, Álava, Guipúzcoa.
Navarra. Pamplona.
Cataluña. Barcelona, Tarragona, Lérida y Gerona.
Comunidad Valenciana. Castellón de la Plana, Valencia y Alicante.
Islas Baleares. Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera. Palma, Mahón, Ibiza y San Francisco.
Océano Atlántico.
27 de septiembre de 2010
GEOGRAFIA TANGUERA XXXIV : SIEMPRE SE VUELVE A BUENOS AIRES
De estos dos dias de tango creo que el espectáculo que más me sorprendió fué este. No porque fuera el mejor, sino porque no esperaba encontrar esta pequeña joya. El grupo se llamaba Tango Transhumante y estaba compuesto por una guitarra, un contrabajo (en este caso contrabaja), y un cantante muy particular. Un cantante muy alejado del tipo duro, varonil que, cornudo o no, guapo o no, engrupido o no, se asocia con el tango. En fin, un tipo para el que el sentimiento tanguero no era cuestión de testosterona. Un repertorio clásico, Manzi, Expósito, Discépolo, Cátulo, Cadícamo... , una delicia. La birra de litro a 15 pesos , la empanada a cuatro y una edad media de los cafeligreses en torno a los veintipocos años. ¿Qué más se puede pedir?
Aítos de tangos nos fuimos a dormir. Stop.
"yo nací en un conventillo de la calle Olavarría
después me mudé a un consorcio pa´figurar en la guía..."
El lugar se llamaba "Concierto de cuchillos" y amenizaba la comida una orquesta de jóvenes tangueros llamada Orquesta Típica Esquina Sur , sugerente olor a pasta recién horneada y botella de semillón. Siempre me han gustado esos grupos jóvenes que tocan "a la gorra" allí donde les dejan. Todos siguiendo en procesión al piano que trasladan en un carrito por entre las calles empedradas. Merecen todo mi reconocimiento. Los domingos intentan tocar en una esquina en San Telmo y durante la semana buscan una milonga en la que actuar aunque sea a las tantas.
Y precisamente a San Telmo nos dirigimos a eso de las ocho para presenciar la presentación de un disco de la pianista Hilda Herrera sobre temas de Gardel. El lugar se llama "La scala de San Telmo", curioso lugar con una programación estable financiada por sus socios y con dos ambientes musicales distintos. Un salón de actos con un piano y con capacidad para 40 ó 50 personas, y un bar con cuatro o cinco mesas y otro piano donde hay actuaciones de madrugada. Desgraciadamente la musicanta se lesionó un dedo mientras interpretaba "Golondrinas" y se tuvo que cancelar el concierto. Una pena porque los pianos de La Scala son estupendos (no es fácil escuchar buenos pianos) y la pianista estaba muy en su papel recreando, que no versionando, la obra de Gardel enfrente de su más que magra audiencia. Acertada apuesta, porque como ya he dicho en alguna ocasión, a Gardel no se le puede versionar si no se quiere salir trasquilado del encuentro. Lo sublime no se puede mejorar. Y si no, que se lo pregunten a Mederos.
En el Torcuato Tasso tocaba "La Chicana" y pese a intentarlo no encontré entradas. Afortunadamente, atraves de Cucuza (ya en otras ocasiones he hablado de él y de El Faro) nos encontraron un hueco. Gracias, Hernán, y que te vaya lindo. La Chicana es uno de los grupos con más renombre de los que se dedican a la música rioplatense, con Dolores Solá como cantante y Acho Estol como lider y compositor. En el desertico páramo de letristas en que se ha convertido el tango actual hay algunas, pocas, excepciones. Una es Vattuone, otra el Tape Rubí, otra Szwarcman, otra Raimundo Rosales y quizás la más destacada sea la de Acho Estol. Por supuesto que todo es matizable. Estuvo como cantante invitado Alfredo Piro, hijo de Osvaldo Piro y de la Rinaldi, y cantó un par de temas del uruguayo Zitarrosa que ya se los oí el año pasado en La Peña del Colorado. El espectáculo estuvo muy bien aunque sobraran esos guiños de progresía antisistema difícilmente creibles por venir de la boca de Solá y Estol, cuyas familias no son precisamente descamisadas. Hace unos años llevé a mi padre a oir a La Chicana a un hospital psiquiátrico creo recordar que por Barracas. Se trataba de un proyecto de musicoterapia, de ayuda a los enfermos através del baile del tango. Y allí estaban ellos ayudando a los locos, y a fe que los había muy pero que muy locos. Fué una experiencia inolvidable que da una dimensión especial al tango y a La Chicana algo alejada de la pose de falsa trasgresión del otro día. Gracias Cucuza por la invitación.

Cuando acabó el espectáculo del Torcuato, nos fuimos al CAFF (Club Atlético Fernández Fierro) a oir a la orquesta titular del local. Estupendos como siempre, sugerentes, excesivos, vibrantes, inimitables, todo es poco para definir los conciertos de la Fernández Fierro. Hay que ir a oirlos, mejor dicho, a verlos y disfrutar de un "Chino" Laborde con más cara de loco cada vez. No es un tango fácil, pero a los aficionados nos fascina y nos sorprende la puesta en escena más propia de un concierto de U2 que de una orquesta de tango. No hay nada en la galáxia tanguera actual que se parezca a la Fernández Fierro, cual si fueran Jimmy Hendrix del bandoneón con rotura de fuelle incluida. Un lugar y una orquesta de culto.
La noche ya apretaba y tuvimos que sacudirnosla en un último garito, así es que, por oroximidad geográfica, repetimos en el Sanata. Allí tocaba un terceto, Boero-Gallardo-Gómez, con claras reminiscencias Piazzollianas, que, lo que son las cosas despues de oir a los Fierro, nos pareció hasta clásico. Ni el lugar, ni el ambiente ni el grupo nos defraudaron, y lo que iba a ser tan solo una copa se convirtió en el concierto entero. Un lindo concierto con temas mitad propios y mitad clásicos. Sorprendentes los temas propios, sobre todo una suite con tres movimientos dedicada a los pintores de la Boca, del que ahora solo recuerdo a Quinquella. Allí saludé a los pibes de "Rascasuelos", cuyo bandoneón, por cierto, había estado acompañando a La Chicana.
Con la oscuridad clareando me volví al hotel, me apreté una pizza madrugadora y me metí en la cama. Al día siguiente volvía la cruda realidad, el avión y el hemisferio norte.
"decite adiós a vos... ya ves no puede ser
si siempre, siempre sos una razón para volver.
siempre se vuelve a Buenos Aires
(E.Blázquez- A.Piazzolla)
GAVION
9 de septiembre de 2010
CORÁN E INTOLERANCIA

Por supuesto que no. Y eso es porque no hay grupos cristianos ni judíos que ante un acto de ese tipo se dedique a quemar banderas afganas, amenazar de muerte al autor o hacer atentados contra cualquier cosa musulmana.
Quemar coranes, cocinar crucifijos, decapitar budas… son todas acciones de mal gusto y que ponen de manifiesto la falta de respeto de alguien por los sentimientos religiosos de los demás. Pero que no perjudican directamente la integridad de ninguna persona ni sus propiedades (salvo que uno, para más INRI, se dedique a quemar, cocinar o decapitar cosas que, encima, son del ofendido).
Es cierto que hay países (entre ellos España) que tienen leyes que prohíben ese tipo de acciones y recientemente hemos conocido una sentencia condenatoria contra un famoso cantautor.
Yo no creo que deba haber ese tipo de prohibiciones pero, en todo caso, se ha seguido un proceso legal con garantías y el acusado no ha estado en prisión preventiva ni creo que haya sentido ni por un momento que peligraba su integridad física.
Mucha gente cree que ser tolernate consiste en que te tienen que gustar todas la cosas que hacen los demás y que son legales. Pero eso es peligroso, porque, al final, parece que si algo no te gusta debería ser ilegal (por ejemplo, que los hombres de sobaco peludo lleven camisetas sin mangas).
Y no. Ser tolerante es aceptar que los demás tienen derecho a hacer cosas que no te gustan, que te molestan, te desagradan o te repugnan siempre que no te perjudiquen.
Que la gente tiene derecho a hacer películas porno aunque te resulten asquerosas; que tienen derecho a decidir que en su establecimiento se puede fumar, aunque te moleste el humo; que uno puede hacer campañas publicitarias promocionando ideas con las que estás en desacuerdo; que puede hacerse una casa horrorosa o ver programas de telebasura si le gustan..
Y que tiene derecho a burlarse de tus convicciones religiosas y a destrozar o denigrar los símbolos de esas convicciones.
La tolerancia es el precio que tenemos que pagar por la libertad (la publicidad, por el libre mercado y las campañas electorales, por la democracia). Y es una de las cosas que debemos defender a toda costa.
Es triste que una acción de ese tipo lleve a una serie de fanáticos a emprender acciones violentas. Pero tenemos que tener claro que son ellos los que lo hacen mal, no nosotros. Y que una de las razones por las que se supone que están luchando los soldados americanos en Afganistán es que también se puedan quemar coranes allí sin que se castigue al autor. Aunque les fastidie a muchos.
6 de agosto de 2010
14 de julio de 2010
HISTORIAS PARALELAS I

BUENOS AIRES 1978
PROCESO DE REORGANIZACION NACIONAL
22.000 DESAPARECIDOS

MADRID 2010
LEY DE SALUD REPRODUCTIVA (LEY AIDO)
106.000 ABORTOS
GAVION
5 de julio de 2010
GEOGRAFIA TANGUERA XXXIII- El Faro, el Tango y la Libertad

Llevo más de diez años como adicto, y afortunadamente asiduo, a la Reina del Plata. Buenos Aires no está, pese a lo que los porteños crean, entre las ciudades más bonitas del mundo (y a fe que por mi trabajo conozco muchas). No está entre las más limpias ni cuidadas, tampoco entre las más cómodas para el visitante ni entre las que tiene mejores hoteles ni mejor calidad de vida... Sin embargo posee el atractivo especial de estar entre las que más vida artística, cultural y musical tienen, de disponer de una red de cafés envidiablemente atractivos y de ser la cuna de algo indisolublemente unido a estos establecimientos: EL TANGO. Algo tan maravilloso que es capaz de resistir incluso la agresión de ser nombrado por los memos de la UNESCO como Património Intangible de la Humanidad.
En este tiempo he compartido con los lugareños las tropelías de Menem, de De la Rúa, de Dualde o de l@s Kirschner (Kirschner ella y Kirschner él) y ninguno, pese a sus esfuerzos, ha conseguido acabar con este sentimiento, en este caso justificado, de orgullo cultural. Aún recuerdo con emoción, y no es sólo una figura literaria, hacer cola durante el primer año del corralito para ir a ver el espectáculo TANGUERA detrás de dos ancianitas que comentaban entre ellas lo que habían tenido que vender (no sé, el gato de porcelana, ya a su edad ¿para qué?) para poder pagar la entrada del ODEON. “Y a ver si nos sobra para ir mañana al Luna a verlo al Cacho Castaña”.
A esa fuerza no la para nadie. Por eso no dudo que la vida seguirá también en EL FARO, por mucho que los políticos, octava plaga bíblica, se empeñen en convertir el Tango en algo sin alma, en el pastiche del Tortoni o en las tanguerías para japoneses de a 300 dólares la entrada con caballo de gaucho incluido, dos valses, una milonga y “Caminito” para llenar el dia y medio que pasan en Bs As de camino al Perito o a Iguazú.
He paseado mucho por Buenos Aires, por casi todos sus barrios y a casi todas las horas. Por barrios aconsejables y por otros muy poco aconsejables para hacerlo. Y nunca, ni a mí ni a nadie, oí quejarse de las notas que pudieran escaparse através de las vidrieras del Richmond, del Bar Oviedo, de La Perla, del Argos o del Bar de la U. Tampoco del Cao, del Nostalgia ni del Vesubio, ni, por supuesto, tampoco de EL FARO. He trasnochado por algunas calles donde ver una ochava iluminada e intuir el rasgueo de una guitarra o el rezongo de un fuelle te hacía olvidar la oscuridad, la basura, la miseria e incluso el miedo que respirabas. Después de atravesar monstruosos “kingkonescos viaductos”, aceras levantadas donde los pibes cartoneros jugaban al fútbol de madrugada con una pelota hecha de bolsas de plástico mientras esperan el camión que se los llevará mezclados con la basura, sucios edificios abandonados por una crisis crónica, después de ser agredido por bondis que dejan su reguero de fuel y decibelios... llegabas a “lo del Chino”, o a la trasera del C.C.Sur desde Barracas o a otros muchos lugares desconocidos y veías el retrato de Gardel sonriendo, manteniendo el tipo en medio de una ciudad que se desangra.
Pues bien, al parecer, lo que ahora molesta, lo que chirria, lo que contamina no es que desde hace décadas cada administración haga buena a la anterior, no es que los chicos de diez años estén de madrugada en la calle en vez de estar velando “sus delantales de aprender”, no es que los hierros al aire de esos viaductos eternamente inconclusos se oxiden dando a la ciudad aspecto de Mad Max, no es que en el subte no puedas hablar con tu compañero de asiento por el ruido de unos vagones con más años y menos cuidados que la confiteria EL MOLINO. No, no, lo que molesta, lo que hay que prohibir, lo que va en contra del bien común es que un grupo de gente, de barrio, de tango, se reunan en un local para olvidar las desgracias que les ha tocado vivir coreando a Manzi, a Cadícamo, a Expósito, a Blázquez o a Canet. Eso siempre y cuando los colectivos que por allí pasan no ahoguen la voz del cantor. Ni aunque los que cantaran fueran los mismísimos IRON MAIDEN harían más ruido que los autobuses que mantiene en servicio el mismo que quiere apagar EL FARO. Ni eso nos dejan, ni disfrutar en compañía la tristeza, la asunción de la fatalidad que ellos mismos nos provocan.
Vamos de cabeza hacia la cultura aséptica,oficial, de celofán, que no huela, que no se note, que no transpase, que no nos emocione. Todo por nuestro bien. Me recuerda a un irónico cuento de Angel Palomino en el que no se puede conceder al condenado a muerte su último deseo, fumarse un cigarrillo, porque eso era malo para su salud. En un país con una fractura abierta en la cabeza se quiere curar con penicilina las rozaduras de los zapatos. Después se fotografían compungidos delante de la negra mortaja de Juárez.
Perdonad amigos, perdona Cucuza, perdón Hugo si me he mostrado algo agrio, pero a mí estas cosas “me ponen los huevos al plato”.
GAVION.
16 de junio de 2010
SOCIALISMO Y GALLINAS

Las gallinas tienen la vida organizada y controlada desde que nacen hasta que son ¡ay! enviadas al matadero.
Sus necesidades vitales están tasadas y se les suministran los medios para satisfacerlas sin excesos pero tampoco sin defectos. Luz, aire, temperatura, comida, agua, espacio, nidales, vacunas, higiene, todo está pensado para que las gallinas vivan sin estrés durante su vida útil. Nadie mide lo que come cada una ni los huevos que pone individualmente. Una gallina podría pasarse su vida sin poner un solo huevo y nadie se daría cuenta.
“¡Qué metáfora -pensé yo- del ideal socialista!” Como bien establece el principio popularizado por Karl Marx (y enunciado por primera vez parece que por Louis Blanc) en la granja se da a cada gallina según su necesidad y se obtiene de ella según su capacidad (de poner huevos), sin que nadie proteste o se queje.
Ellas no viven del fruto de su esfuerzo. Sus huevos son entregados íntegramente al granjero. Pero a cambio obtienen gratuitamente todo lo que es necesario para ellas. Es una sociedad perfecta. Un grupo de seres superiores piensa por ellas y les da una existencia confortable, mientras que ellas solamente tienen que preocuparse por disfrutar de los bienes a su alcance y poner los huevos que buenamente puedan, sin que su mayor o menor rendimiento redunde para bien o para mal en su calidad de vida.

Como bien dice mi padre (él me asegura que la cita es de Churchill, pero me temo que no puedo asegurarlo) del socialismo, “Sistema correcto. Especie equivocada“.
Así que, ahora, cada vez que oigo a los políticos declarar su interés en ofrecer al ciudadano más y más servicios sociales (a cambio de más y más impuestos, claro está), hablar de su preocupación por nuestra salud y felicidad y pontificar sobre las bondades del estado de bienestar, qué quieren que les diga… me dan ganas de cacarear.
3 de junio de 2010
GEOGRAFIA TANGUERA XXXII- Y ahora, Rubén ¿Qué tango hay que cantar?






18 de mayo de 2010
GEOGRAFIA TANGUERA XXXI- Tango en El Faro

Esta es una entrada atípica porque es un humilde reconocimiento a un lugar muy particular.
El lugar del que quiero hablar es el bar El Faro. Lejos, muy lejos de la parte del sudoku urbano bonaerense por la que se mueve el visitante. No se si en Agronomía, en Parque Chas o en Villa Pueyrredón, pero lo suficientemente lejos como para que a mi acompañante se le empezara a desencajar la cara dudando del taxista que hasta allí nos llevó. Pero ya hace algún tiempo que yo quería conocerlo y esta fue la ocasión.
El bar El Faro es un bar en ochava, como

Bien elegido el nombre del espectáculo porque es verdad lo del tango y lo del barrio, aunque visto lo visto también podía decirse que es el barrio el que vuelve al tango.
Hernán “Cucuza” Castiello es un buen cantor al que yo conocía por una versión de un tema de Acho Estol en su disco Buenosaurios. Eso sería suficiente, pero es que además parece ser un excelente tipo. Con un cartel consolidado en Buenos Aires se ha convertido en guía, faro y de alguna manera mecenas de una generación de músicos que parecen sentir devoción por él. Puedo testificar que lo adoran. Y no voy a hablar más de él porque lo conozco poco, apenas unas horas, pero eso, Cucuza, lo arreglaremos el próximo viaje.

Algunas veces, pocas, encuentras atmósferas como esta. Yo recuerdo algún trasnoche milonguero en el festival de granada co Zárate, Aníbal Arias y Guillermo Fernández. O alguna madrugada en el Bar de Roberto, al que hace unos años que no voy. O una larga velada en el Café Homero con Juárez rodeado de sus “barras bravas”. Momentos especiales en los que no sabes si el tango te entra al cerebro o te sale del cerebro por las goteras del cráneo.
Cucuza tiene un guitarrista, grande Moscato Luna, que aparenta ser el mismísimo diablo y puede que no solo lo aparente y junto con otros amigos como Lucio Arce (Lucio, ya estoy digiriendo tu segundo CD), Hernan Lucero, Patricio Crom(del grupo “Malo conocido), la “polaca” Rozenwasser (del grupo-oxímoron “Vanguardia vieja”) , Margarita la contadora de cuentos de nuestra vecina mesa y otros muchos de los que allí estaban componen lo que alguien definió, parafraseando a De Caro, “Alta bohemia”.
El espectáculo


Una hora después de que los puestitos de prensa abrieran, cuando ya las noticias del diario del día quedan obsoletas, y tan solo media hora antes de que el sol le pusiera el punto a la i del Obelisco, decidimos apagar la fábrica. Como solo le dimos al botón de standby supongo que será fácil volver a hacerla funcionar.
En fin, siete u ocho horas de tango en grupo, pero de tango sin grupo. Se debieron tocar más de cien temas de todas las épocas y autores con la salvedad (imperdonable, Cucuza) de Eladia Blázquez. Y mi acompañante de este viaje, que jamás en su vida había oído un tango, se emocionaba con Contursi y se partía de risa con Martino. Y se volvió al hotel pidiendo más.
Gracias de corazón a este grupo que nos admitió, sobre todo porque no nos advirtió. Y un reconocimiento al aguante de los hospitalarios dueños de un local que no debe cambiar. Y no se preocupen, que si es por la audiencia de este blog, no lo hará.
GAVION
6 de mayo de 2010
LITERATURA POPULAR VII. HUMOR GALLEGO.
Aparte de pasarlo estupendamente (las monjas siempre son muy buenas anfitrionas), tuve ocasión de añadir una nueva imagen a mi colección de letreros curiosos. En realidad, es una pareja de letreros.
En una casa de Pontevedra:
Y en la casa de enfrente:
28 de marzo de 2010
GEOGRAFIA TANGUERA XXX-Grandes orquestas 2

El pianista Di Sarli es continuador de esa linea bailable, amable, de orquesta milonguera que inició Fresedo. Con el peso de la función sobre la linea de violines y unos bandoneones algo retirados, y eso que contaba con excelentes fuelleros como Leopoldo Federico. El director creó un estilo p

También en esta linea se encontraba la orquesta de De Angelis. Fué esta orquesta ejemplo de simpleza y popularidad. Estéticamente heredera de las Big Bands americanas en la posición de los instrumentos, en los atriles... y con un dúo de cantantes, Dante-Martel, sobre los que se apoyaba su éxito. Música fácil para demostrar lo difícil que es hacerlo bien, no como otros que demuestran día tras día los esfuerzos que les cuesta hacer las cosas mal. Esta orquesta era llamada “la calesita” lo que da una idea de lo cercana que la sentía el pueblo.
Otra línea más innovodora, más creativa, es la que abriera Julio de Caro. El continuador de esta linea es Osvaldo Pugliese. En diciembre de 1902 nace Osvaldo Pedro Pugliese en una familia aficionada a la música. Su padre era zapatero ( como el de las góticas) además de flautista, dos ocupaciones que siempre han ido de la mano. Sus hermanos violinistas y él, por incordiar, pianista. Con 15 añitos, cuando afortunadamente la escolarización no era obligatoria, se inicia profesionalmente en el Café de la chancha, así conocido por la mugre que atesoraba casi desde que Juan de Garay redescubriera aquellas tierras. Acompañó a Francisca Bernardo, la primera mujer( al menos eso dicen) bandoneonista de la que se tiene noticia

Este estilo tanguero lo transitó también, y lo llevó a sus más altas cotas la figura cumbre, a mi modo de ver, de la historia del tango, Astor Piazzolla. Ya se que este es un tema controvertido, algo parecido a la discusión del sexo de los ángeles , a si es mejor Elvis o Los Beatles o a si preferimos la tetolatría sajona a la culolatría latina. Pero el tiempo lo pone todo en su lugar, y después del terremoto que supuso la revolución Piazzolliana empieza a aceptarse como un hecho la superioridad de su obra. Y esa aceptación es mucho mayor, yo diría que total, entre los profesionales del tango. No voy a contar nada de Piazzolla ahora, porque tengo otra entrada a medio acabar sobre el genio y amenazo con publicarla próximamente. Pugliese que comentaba que Piazzolla tenía que bajar el listón porque les obligaba a todos los demás a estudiar.
Piazzolla


Aún podíamos hablar de otra corriente dentro de las orquestaciones de los cuarente y cincuenta. Es la linea que abrió Canaro, y cuyo principal continuador es Mariano Mores.Mores es, porque aún vive, un tío listo, buen músico y que se sabe sacar provecho, en fin, todo espectáculo. En 1937 , por mediación de Sciamarella para quien compuso “Amor, dinero y salud” (increíble ¿verdad?) conoce a Ivo Pelay, y este lo enchufa en la orquesta, bueno, en una de ellas, de Francisco Canaro, con quien comparte la visión del negocio. Con la lección bien aprendida forma orquesta propia. Mores, compositor de temas como Uno, Gricel o Cafetín de Buenos Aires, eleva el número de componentes de la orquesta y le añade instrumentos y timbres nuevos dentro de un concepto de orquesta espectáculo con luces, bailarines y todo lo que haga del tango un show con él de maestro de ceremonias.Si alguien de mis lectores ha tenido la ocasión de ver el montaje del espectáculo “Tanguera” entenderá de lo que hablo. Compuso sus mejores temas con letras de Jose María Contursi(“Cristal”, “Gricel”, o “En esta tarde gris”) y de Discépolo (“Cafetín de Buenos Aires” o “Uno”). Discépolo decía de él:”Pibe, a partir de ahora ya no escribo mis músicas, para eso estás vos”.Yo tuve la suerte de ver junto con mi viejo un espectáculo inaugural del festival mundial de hace unos años en la bonaerense rosaleda de Palermo y puedo decir que esto era así. Espectáculo puro y eso que el maestro empezaba a estar algo momificado. Y no me extraña, teniendo en cuenta que empezó con su orquesta, la “Orquesta lírica popular” a finales de los cuarenta, aunque por su excesiva simpatía peronista fué castigado en algunas ocasiones.
A mediados de los 50' se agota el modelo y aunque no desaparecen las orquestas estas reducen mucho el número de musicantes. Horacio Salgán o Piazzolla mantienen orquestas antes de entrar en las oscuras décadas de los 60'y 70', pero ya no será lo mismo. La suerte de las grandes orquestas estaba echada y, aunque actualmente hay un resurgimiento de orquestas de corte clásico e incluso de cantantes con orquesta como en los últimos trabajos de Guillermo Fernández o de Ariel Ardit, la época de oro terminó junto con ellas.